El cielo de Kenia tiene otro color by Isabel Keats

El cielo de Kenia tiene otro color by Isabel Keats

autor:Isabel Keats [Keats, Isabel]
La lengua: spa
Format: epub
Tags: Novela, Romántico
editor: ePubLibre
publicado: 2023-05-03T00:00:00+00:00


—¡Mister Jarrett, ha llegado un telegrama para usted! —Njeri le tendió el sobre con expresión alarmada—. Espero que no sean malas noticias.

MJ soltó la tostada que estaba comiendo, se limpió la mano en la servilleta y abrió el sobre con el ceño fruncido.

—Nada grave —dijo cuando terminó de leerlo—, pero necesito ir a Nairobi unos días. ¡Peter!

Su sobrino, que acababa de entrar a coger un par de plátanos del frutero, se dio la vuelta.

—Haz la maleta, tenemos que ir a Nairobi.

—¿A Nairobi? ¿Ahora? —El rostro juvenil no podía disimular una profunda decepción—. Precisamente Makori me iba a enseñar los cabritos recién nacidos, solo he venido a coger unos…

—Los cabritos tendrán que esperar. Salimos en media hora, ¿entendido?

—Entendido, iré a decírselo a Makori. —Peter volvió a dejar los plátanos en el frutero y salió arrastrando los pies.

MJ lo siguió con la mirada sin dejar de fruncir el ceño.

—Me temo que lo he consentido demasiado estas últimas semanas.

—No se enfade con él, mister Jarrett, al fin y al cabo «cada hombre deja sus huellas». Quizá las de Peter no seguirán las suyas.

—No creo que a su madre le gustara oír eso. —MJ le tendió la mano—. Gracias por todo, Njeri. ¿Sabe dónde está la señorita Darby? Me gustaría despedirme de ella.

—Beka ha salido con Astrid; hace semanas que le había prometido que la dejaría conducir el todoterreno por la reserva. Creo que tenían planeado llegar hasta uno de los lodges con un cargamento de verduras frescas y quesos, y quedarse a comer allí.

MJ maldijo en silencio. Aunque se habían visto durante las cenas y en la mayor parte de las comidas, Beka y él apenas habían hablado desde los agitados acontecimientos de aquel maldito tour. A este paso, su plan iba a quedar en nada.

«Estos días que esté fuera tendré que planear una nueva estrategia», decidió.

Era imprescindible que Vibeka Darby se olvidara por completo de aquel sonrojante paso en falso, más propio de un principiante que de un hombre que, como él, se preciaba de conocer bien a las mujeres.

—Entonces despídame de ella, por favor, y dígale que no se haga ilusiones. Regresaré lo antes posible.

MJ abandonó la cocina a toda prisa, y Njeri recogió la taza sin dejar de sonreír.



descargar



Descargo de responsabilidad:
Este sitio no almacena ningún archivo en su servidor. Solo indexamos y enlazamos.                                                  Contenido proporcionado por otros sitios. Póngase en contacto con los proveedores de contenido para eliminar el contenido de derechos de autor, si corresponde, y envíenos un correo electrónico. Inmediatamente eliminaremos los enlaces o contenidos relevantes.